Técnicas de última generación para el cuidado, mantenimiento y rejuvenecimiento cutáneo y capilar.
Microdermoabrasión
Terapia de exfoliación mecánica, controlada, precisa y progresiva que permite remover las células muertas de la superficie cutánea; promoviendo la recuperación y el desarrollo de una piel más saludable. Favorece el crecimiento de células nuevas; ayuda a controlar la seborrea y a reducir la formación de comedones; estimula la producción de nuevo colágeno, atenuando marcas y arrugas superficiales.
Peelings Químicos
Aplicación de agentes químicos específicos con el fin de lograr la renovación de las distintas capas de la piel mejorando así su calidad, textura y luminosidad.
Revitalización Química
Incorporación intradérmica de principios activos nutrientes, antioxidantes, regeneradores y tensores de alta efectividad en el rejuvenecimiento de la piel. También se pueden utilizar con gran éxito fármacos específicos para el tratamiento del acné y diversas dermatosis de tipo molesto y antiestético como ser rosácea, dermatitis seborreica, psoriasis, vitiligo.
Revitalización Biológica
Aporte a nivel dérmico de peptonas (péptidos bioactivos) de acción órgano-específica, que contribuyen a la reparación celular de la piel y a la restauración de las funciones cutáneas. Las mismas ejercen sobre los tejidos un efecto similar al de un nutriente, energizándolos y estimulando su regeneración.
Viscosuplementación
Biorevitalización e intensa hidratación cutánea de larga duración a través de la utilización de ácido hialurónico de estructura lineal (diferente a los reticulados utilizados como sustancias de relleno). Se trata de un producto sintético, bioidéntico, biocompatible y libre de propiedades antigénicas.
Bioestimulación Plaquetaria con Factores de Crecimiento Autólogos
Los factores de crecimiento son mediadores proteicos biológicos naturales que se encuentran en todas las células del organismo, estimulando la regeneración o reparación celular específica del tejido donde actúen. Hoy en día se aplican en Dermatología Cosmética, ya que favorecen la renovación de la piel, teniendo como resultado una piel más turgente, lozana y luminosa. También se usan en pacientes con úlceras, quemaduras, marcas, cicatrices y estrías, por su gran capacidad bioregenerativa.
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Elegimos las plaquetas dado que son células sanguíneas de fácil obtención.
A partir de una pequeña muestra de sangre (extracción equivalente a cualquier valoración general de laboratorio) enfrentada a un protocolizado procedimiento de centrifugación se logra un Plasma Rico en Plaquetas.
Las plaquetas, por un sistema específico de desgranulación liberan los Factores de Crecimiento, lográndose obtener así un Plasma Rico en Factores de Crecimiento Autólogos, es decir, del propio paciente.
Esta técnica se debe realizar en un ámbito adecuado (consultorio) con todas las medidas de higiene y bioseguridad necesarias (en el mismo momento, en el mismo lugar y delante del paciente) y debe ser manipulada por personal especializado. Una vez obtenidos, tenemos varias formas para la aplicación de los mismos:
Forma tópica – Para estimular la cicatrización. Ejemplo: tratamientos de úlceras, quemaduras, aplicación post – peeling médico, post – láser, eccemas, etc.
Forma subcutánea – Para relleno de surcos, cicatrices o como tratamiento coadyuvante de la celulitis.
Forma intradérmica o mesoterápica – La cual ha demostrado ser muy beneficiosa como vía de revitalización general de la piel. Se aplica en arrugas, estrías, marcas, cicatrices post – lifting, etc. Los pacientes se manifiestan muy satisfechos con la mejora en el aspecto, la textura, la tersura, la tonicidad, el brillo y la luminosidad cutáneos. Se está aplicando también como nueva alternativa en las terapias capilares, lográndose excelentes resultados en cuanto a la disminución de la caída y fortalecimiento del pelo, así como en la estimulación de su crecimiento.
Los Factores de Crecimiento son específicos para los tejidos de cada individuo, lo que hace de este sistema un tratamiento absolutamente personalizado y por tanto, libre de riesgo de rechazo o alergia.
Asimismo, el protocolo de aplicación del Plasma Rico en Plaquetas será establecido por el médico en función de las características de la piel a tratar y del grado de envejecimiento que la misma presente.
Se trata de un tratamiento ambulatorio, sin tiempo de recuperación, aplicable a cualquier persona que desee mejorar la calidad de su piel independientemente de edad y sexo.
El abanico de posibilidades terapéuticas no quirúrgicas se ha incrementado inmensamente en los últimos años y dentro del capítulo de los tratamientos biológicos como terapia antienvejecimiento, la “Bioestimulación Plaquetaria con Factores de Crecimiento Autólogos” está llamada a convertirse en uno de los pilares fundamentales para el mantenimiento y rejuvenecimiento de la piel, ya que de una forma muy fisiológica y natural, a través de un material inocuo, atóxico y sin capacidad alergénica, devolvemos lozanía y juventud a la misma.
Carboxiterapia
Uso médico del gas dióxido de carbono (CO2) por vía intradérmica y/o subcutánea. La aplicación se realiza a través de un equipo especialmente preparado para este fin, el cual permite regular la velocidad de flujo, el tiempo de aplicación y monitorear el porcentaje de dosis administrada. Proporciona una mejoría en la microcirculación y en la oxigenación de los tejidos. Además de optimizar el metabolismo de las células dérmicas, ayuda a mejorar el aspecto y la firmeza de la piel, así como también permite obtener excelentes resultados en revitalización capilar.
Oxígeno – Ozonoterapia
Aplicación de gas ozono medicinal con fines terapéuticos. Gracias a sus múltiples propiedades (oxigenante, inmunomodulador, analgésico, desinfectante, regenerador, antioxidante) permite el tratamiento específico de distintas patologías de piel; favorece la hidratación, la turgencia y la elasticidad cutáneas. Además su gran capacidad antioxidante la convierte en una terapia inmejorable de la medicina anti envejecimiento.
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El ozono medicinal (O3) fue usado por primera vez durante la Primera Guerra Mundial para la limpieza y desinfección de heridas. Sin embargo, no fue hasta la creación de aparatología generadora de O3 de rigurosa calidad y precisión; que permite dosificar con exactitud la cantidad, el tiempo y la velocidad de flujo; que se posibilitó su uso en medicina con fines terapéuticos.
El O3 es generado a partir de oxígeno medicinal, concentrado, puro y estéril. Se trata de un “oxígeno especial” y como tal puede ser administrado, por distintas vías, en dosis y concentraciones variables, adecuadas y programadas según los datos del paciente y la patología a tratar.
El Ozono Medicinal es:
♦ OXIGENANTE Aumenta la capacidad de la sangre de absorber y transportar más oxígeno a todo el organismo, mejorando así la circulación periférica y la oxigenación celular.
♦ ENERGIZANTE Activa el metabolismo energético de las células, aumentando por tanto la producción de ATP celular.
♦ INMUNOMODULADOR Aumenta las defensas en general. Modula las reacciones inmunológicas exacerbadas que generan las llamadas “enfermedades autoinmunes”.
♦ ANALGESICO Neutraliza los mediadores químicos neurogénicos del dolor.
♦ ANTINFLAMATORIO Facilita la metabolización y eliminación de los mediadores que generan el proceso de la inflamación.
♦ DESINFECTANTE Inactiva y elimina todo tipo de microorganismos patógenos, es por tanto bactericida, viricida y fungicida.
♦ REGENERADOR Promueve la regeneración de distintos tipos de tejidos ya que estimula la secreción de factores de crecimiento, sobretodo el factor de crecimiento tisular, siendo por ello tan usado en el tratamiento de afecciones con déficit circulatorio periférico como úlceras tórpidas, cicatrización de heridas, quemaduras y en Medicina Anti-aging.
♦ ANTIOXIDANTE Es el mayor “barredor de radicales libres”. Es el único medio de estimulación directa de todas las enzimas que actúan como antioxidantes endógenas, encargadas de eliminar el exceso de radicales libres y otros oxidantes endógenos del organismo, es decir, disminuye el grado de estrés oxidativo.
♦ REVITALIZANTE Por su acción oxigenante y antioxidante retarda los procesos del envejecimiento celular (antiaging). Promueve la recuperación funcional en pacientes afectados con enfermedades degenerativas y/o inflamatorias agudas y crónicas.
Por todo ello, es aplicable a nivel de las distintas especialidades médicas: Traumatología, Oftalmología, Inmunología, Gastroenterología, Infectología, Urología, etc.; siendo en “Dermatología” y sobretodo en “Dermatología Cosmética” donde se abre un gran campo terapéutico.
Aplicaciones en Dermatología:
♦ Tratamiento específico de distintas patologías de piel:
– eccemas, psoriasis, liquen, dermatitis seborreica, etc. – acné severo, aftas, herpes, etc. – alopecias o caída del cabello – cicatrices, quemaduras, úlceras de difícil resolución – varículas – celulitis, flaccidez y obesidad localizada.
♦ Tratamiento antiaging de la piel:
Por todas las propiedades enumeradas (oxigenante, reparadora, antioxidante, etc.) se presenta como una terapeútica de futuro para la prevención del envejecimiento de la piel, así como para la revitalización y rejuvenecimiento de la misma.
La Oxígeno-Ozonoterapia utilizada en forma local y/o sistémica representa una verdadera terapia anti-aging para este órgano.
Esta técnica se ha transformado en una terapeútica de elección que no solo nos permite mejorar su calidad y aspecto (hidratación, color, turgencia y elasticidad) sino que además por su efecto inmunomodulador ayuda a mantener el equilibrio cutáneo, disminuyendo por tanto, la incidencia de enfermedades con base inmunológica así como la aparición de lesiones premalignas y malignas de piel.
Se trata de un tratamiento aplicable a cualquier edad y sexo, ambulatorio, inocuo, de rápida acción y alta efectividad, sin tiempo de recuperación.
Puede ser usado solo o combinado con otros tratamientos tales como: Laserterapia, Luz Pulsada Intensa (IPL), Radiofrecuencia, Carboxiterapia, Terapias Biológicas, Factores de Crecimiento.
La Oxígeno – Ozonoterapia constituye un nuevo desafío terapéutico, pasando a formar parte del gran capítulo de las “Terapias de Bioestimulación”, conjunto de procedimientos que pretenden mantener y/o restablecer el aspecto saludable y la óptima funcionalidad de la piel, aportando y/o estimulando elementos constitutivos propios de la misma.
Finalmente, cabe destacar que al ser aplicada por vía sistémica no solo tratamos la piel en profundidad sino que indirectamente hacemos un verdadero antiaging general. Al mejorar la oxigenación sanguínea, la actividad celular y todos los metabolismos (proteínas, glúcidos y lípidos); al ser antinflamatorio, reparador y antioxidante; estamos generando una mejoría significativa en muchos procesos fisiológicos del organismo, lo que conlleva a un mayor bienestar general y a una mejor calidad de vida.